Salir a navegar es, en la mayoría de los casos, salir a divertirse. Existe la falsa creencia de que en los megayates uno no puede divertirse tanto como en los yates de eslora reducida. Sin duda alguna podemos afirmar todo lo contrario, cuanto mayor es la embarcación, más posibilidades de diversión ofrece. Veamos aquí algunos ejemplos que así lo testifican.
Primero de todo nos gustaría separar según los tipos de toys, ya que las posibilidades que engloban son muchas y, sin una clasificación, sería difícil hablar de ellos.
Embarcaciones suplementarias (tenders y submarinos)
En este gran grupo podemos incluir las embarcaciones suplementarias que podemos llevar a bordo. El más típico es el tender, con él no sólo podremos acercarnos a la orilla de las calas más inaccesibles, sino que nos ofrecerá directamente mucho entretenimiento; tanto sea quemando adrenalina navegando a toda velocidad, como usándolo para hacer esquí acuático. Aunque las opciones son tantas como tenders existan en el mercado, es de menester separar entre embarcaciones de motor y de vela. Si bien la mayoría de tenders son a motor, muchos amantes de la vela llevan un pequeño velero a bordo para salir libremente a la mar cuando les apetece. En otro sentido cabe hablar de los submarinos. Unas embarcaciones que cada vez están más de moda. Poco a poco han ido entrando en el mundo del ocio -provenientes de la investigación-. Existen varios tipos de submarinos, pero básicamente uno debe separarlos entre los que son individuales y los que permiten bajar a las profundidades en grupo. O entre los que tienen una autonomía larga y sirven para hacer expediciones más profundas y las que no deben alejarse mucho del megayate.
Arrastrables (Moto acuática, Flyboard, Jetsurf, Windsurf y Paddle Surf)
Más pequeños que las embarcaciones auxiliares, pero con un propósito similar son algunos toys que, en su mayoría, buscan la velocidad. La moto acuática es uno de los más usuales, casi no hay megayate que lleve consigo una o dos motos acuáticas. Éstas cada vez son más maniobrables y el catálogo es variado en potencia, tipo de conducción y asientos -aunque las normales son las individuales, existen de dos o tres asientos-. Paralelamente a la moto acuática se encuentra, desde hace unos años, el Flyboard; un aparato que años atrás sólo era imaginable en las películas ahora está al alcance de todos. Este artilugio se conecta a la moto acuática y, mediante unos chorros de agua, permite que quien lo lleve puesto empiece a volar. Quien lo prueba, repite. Las posibilidades son muchas, desde tan solo volar a hacer piruetas o a convertirse en un delfín entrando y saliendo del agua.
También mecanizado es el jetsurf, mediante el cual, sólo con pulsar un mando a distancia podemos hacer que nuestra tabla se desplace a toda velocidad.
Aunque para los más clásicos sigue estando en voga el windsurf y, sobre todo, el paddle surf.
Hinchables (toboganes, piscinas, cabanas)
Muchos dirán que son para los niños, pero la experiencia dice que los mayores lo usan tanto o más que ellos. Toboganes por los que tirarse al agua desde lo más alto de un barco de cuatro cubiertas no parecen pensados para criaturas. Montarse en el clásico banano y/o las rosquillas/donuts que son arrastrados a gran velocidad…son solo algunos ejemplos. La experiencia es única, velocidad y emoción para pasar el rato en alta mar. Como inflables son perfectos para almacenar en espacios más pequeños, lo que permite llevarlos consigo independientemente del tipo de embarcación que alquilemos.
También existen las piscinas. Éstas pueden servir para dos finalidades. Por un lado, les serán útiles a quienes no les guste bañarse en la mar profunda y prefieran sentirse protegidos -ni que sea por una tela fina-. Por otro, los más deportistas podrán montarse fácilmente un divertido partido de waterpolo con porterías y límite de campo.
Últimamente han proliferado también las cabanas, son piscinas que protegen también del sol, creando diferentes espacios al aire libre sobre el agua.
Submarinismo (snorkel y Seabob)
Los amantes del submarinismo o del snorkel tienen, gracias a sus enormes embarcaciones, la posibilidad de transportar sus lujosos equipos de buceo consigo mismos. Bombonas, aletas, trajes de neopreno…todo lo que uno necesite para saltar al agua y empezar a observar la naturaleza a unos cuantos metros de profundidad. Aunque si lo que se quiere es nadar menos, propulsores como el Seabob ayudan a desplazarse con comodidad y sin agotamiento.
Kayaks y canoas
Los kayaks y canoas son una excelente forma para conocer de primera mano aquellos rincones a los que difícilmente podríamos acceder con una embarcación (cuevas y recónditas calas) y, a su vez, practicar deporte, solos o acompañados. No precisan de una gran destreza física, solo conocer las técnicas básicas y, lo mejor, son adecuados tanto para los principiantes como para los más experimentados.
Seguridad
El objetivo, cabe recordarlo, es divertirse. Es cierto que todo toy comporta cierto riesgo, pero al fin y al cabo, todo lo conlleva. Por eso, en Island Yachts Broker nos gustaría recomendar no olvidarse de la seguridad. Tanto en lo que comporta al mantenimiento (en embarcaciones: gasolina, aceite,…) como a la instalación (hinchables bien sujetos, sistemas de seguridad de submarinos activos…) como al uso (evitar el contacto entre motos de agua, usar casco cuando sea necesario, etc.).
Alquilar un barco en Menorca no solo se convertirá en un recuerdo inolvidable si no que te permitirá disfrutar y probar todas aquellas actividades y deportes que siempre quisiste hacer.
Todas las imágenes y videos están protegidos por derechos de autor.